En la argumentación del paquete económico se da un dato que es terrible para la infancia mexicana: las y los niños de entre 2 y 12 años consumen al menos una bebida azucarada al día, que en promedio representa el 6.8 % del total de calorías consumidas diariamente, superando la recomendación internacional de la OMS, que establece un límite de 5 % de la ingesta energética diaria proveniente de azúcares libres, señaló la senadora Beatriz Mojica Morga.

Este consumo desmedido, por medio de “refrescos”, jugos y otras bebidas endulzadas, afecta la salud de niñas y niños desde edades tempranas, ya que se asocia con obesidad infantil, riesgo temprano de diabetes tipo 2, presión arterial elevada, menarquia temprana y caries dentales.

Ante esto, precisó la senadora guerrerense: “Respaldo totalmente a nuestra presidenta Claudia Sheinbaum con el incremento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a estas bebidas, que planteó en el Paquete Económico 2026”.

“Las niñas y niños mexicanos, en general, tienen altos niveles de consumo de azúcares por medio de estas bebidas y, por lo tanto, altos niveles de obesidad que generan una serie de enfermedades”.

Es una medida de salud pública más que recaudatoria, por lo que beneficia sobre todo a los menores. Además, detalló: “Mientras las y los mexicanos destinamos miles de millones de pesos para enfrentar las consecuencias de este consumo, las grandes empresas transnacionales generan enormes ganancias en nuestro país, derivadas del alto consumo en diversas zonas”.

Detalló que días antes de la presentación del paquete económico “el Banco Mundial le recomendó a México generar impuestos especiales a las bebidas azucaradas. Me parece que va a ser muy benéfico para nuestro país porque no es un tema de recaudación, sobre todo es un tema de salud pública”.

La presidenta Claudia Sheinbaum ha sido muy puntual en la atención a la niñez, por ejemplo, en la erradicación de la comida chatarra de las escuelas y en medidas que directamente están ayudando a las y los niños, concluyó.

Redacción